El ministro de Defensa, Agustín Rossi, mantendrá esta tarde un encuentro virtual con el embajador de China en la Argentina, Zou Xiaoli, para profundizar los vínculos bilaterales. En la agenda del encuentro figuran temas como la colaboración en ciberdefensa y la compra de aviones de combate JF-17 y de vehículos blindados a rueda 8×8 al país asiático. También se abordará la evaluación de posibles intercambios y experiencias en misiones de paz, el desarrollo de la infraestructura del muelle y de servicios logísticos para la base naval de Ushuaia y la ampliación del Polo Químico Río Tercero de Fabricaciones Militares.
El régimen chino aparece para el Gobierno de Alberto Fernández como un aliado estratégico a nivel geopolítico para América Latina. Además de los tratados bilaterales, Argentina recibió en los últimos años varios riesgosos créditos blandos –aquellos que suelen significar una trampa para países pobres– para ayuda financiera y acuerdos comerciales con los chinos. El jefe de estado Xi Jinping está obsesionado con los recursos naturales de América Latina y nuestro país no escapa a esa lógica. Es por eso que facilita exportaciones hacia sus gigantescos mercados (cerdos, limones y soja, entre otros). A cambio, consiguió el compromiso oficial para construir dos centrales nucleares en la provincia de Buenos Aires, que ya estaban aprobadas durante la administración de Mauricio Macri, además de otras concesiones.
(Infobae)